martes, 26 de marzo de 2013

El peligroso fútbol, algo más que PELOTAS y PASIÓN

En México la pasión que la multitud desborda por su equipo es tal que en gran número de ocasiones, esta llega a las lagrimas cuando su equipo al que le dedican hasta la cabellera, obtiene un triunfo o de lo contrario es derrotado provocando el llanto, el enojo, e incluso la ira, que en algunas ocasiones llega a terminar en combates cuerpo a cuerpo con integrantes de equipos adversarios. 


Imagen común en un noticiero deportivo denigrando a la mujer.

Sin lugar a dudas este deporte esta lleno de sentimientos, ¿pero como es que las personas logran llegar hasta ese grado?. Desde apostar miles de pesos, pertenencias personales, litros y litros de cerveza, por un equipo de jugadores que intentaran meter un balón mayor cantidad de veces en la portería del adversario. La respuesta podemos encontrarla en el televisor, este a diario cumple la función de educar a todo aquel que lo observe con interés o sin el, el televisor le transmitirá a su espectador lo que desee. Aunque al inicio el espectador no este de acuerdo en todo, el televisor buscara la forma de hacer que crean en él, y para eso es capas de llegar a los sentimientos primordiales del ser humano. 

Más que un espectáculo en la pantalla, estamos presenciando un gran número de resultados de investigaciones científicas, que son puestas en practica con el envió de miles de mensajes cada día a sus espectadores. El fútbol es uno de esos mensajes, pero alto, usted de inmediato se preguntara, ¿como es que una pantalla de plasma que funciona con electricidad es capas de transmitir mensajes con el fin de educar?. La respuesta se encuentra en toda la programación, desde el noticiero de la mañana, hasta la platica deportiva del fin de semana por la noche. 



El fútbol en televisión maneja diferentes técnicas que son capaces de modificar el comportamiento de millones de espectadores. ¿Y como lo hace?, no es sencillo, pero si se aprenden las técnicas básicas es extraordinariamente efectivo. Este deporte como muchos otros maneja un principio primordial que es la unión, el mensaje que transmite es que hay que pertenecer a un mismo equipo, este mensaje es transmitido por todos los grupos rivales y cada uno intenta demostrar que es mejor al otro a como de lugar. 

Este mensaje llega a lo más profundo del espectador, ¿pero que tan profundo?. El Orden de los Primates al cual pertenece el ser humano, tiene una característica instintiva muy común entre los grupos organizados del mundo animal, este siente la necesidad de pertenecer a un grupo, ser tomado en cuenta, ser observado y ser llamado parte de él. Esta necesidad nace del comportamiento de supervivencia, este incita al primate a permanecer dentro de un grupo para sentirse protegido. 



Este instinto Primate del ser humano, hace que estos se vuelquen a los grupos, y esto no solo ocurre con el fútbol, también ocurre con los partidos políticos, la preferencias a determinada televisora, entre cientos de ejemplos más. Usted sin lugar ha dudas ha escuchado en su televisor como los conductores de diversos programas diferentes se atacan verbalmente, y lo invitan a permanecer en la sintonia, a pertenecer al grupo, este mensaje llega a usted y de forma instintiva elige uno de ellos. 

En diversas ocasiones no hay muchos grupos para escoger, en el fútbol a pesar de que parece que son bastantes equipos, en realidad en México se dividen en 2 que son los lideres de cada grupo, podríamos llamarlo el líder alfa de la manada; Televisa y TV Azteca, estos lideres llenan de ordenes inconscientes a los seguidores del grupo, el cual se divide en diferentes jerarquías  que van desde los dueños de clubes deportivos, directores técnicos, jugadores, comentaristas deportivos, y al final en la clase más baja de la jerarquía; el aficionado, que funge la función de espectador y lleva a cabo la mayoría de ordenes que se le imponen. 



Pero usted seguramente afirmara que jamas a recibido una orden de esta jerarquía, a continuación  le mostrare un ejemplo de como el instinto primate lo induce a seguir una orden. Ha escuchado hablar de la membresía del Club América y de otros equipos, esta le da descuentos en tiendas deportivas, puede incluso conocer de cerca y convivir con las estrellas del grupo, las jerarquías de mayor nivel dentro de la manada Primate e incluso admirar de cerca a las hermosas modelos del equipo, que pasean semidesnudas mostrando sus mejores atributos. Esta acción provoca de inmediato que el instinto primate desee tener más privilegios dentro del grupo, ¿porque?, este instinto ademas de incitarlo a pertenecer a un grupo, lo ayuda a tratar de escalar en la linea jerárquica, al igual que como ocurre en una manada, los de menor nivel tratan de escalar entre las jerarquías.



Sin embargo mientras millones siguen su instinto, el grupo alfa se hace millonario, y a su vez cumplen con un papel indispensable para que el fútbol continúen teniendo apoyo por el gobierno de su país, tanto que incluso el Presidente de la República se aparece muy feliz en los partidos de mayor rango como en competencias internacionales. 

Todo este conjunto de acciones al espectador lo van alejando de su realidad, el fútbol se convierte entonces en una forma de vida, sin embargo el espectador se pierde de forma permanente en el juego y olvida que es parte de otro sistema muy similar a este, pero que engloba otro tipo de jerarquías, la política mexicana, la cual demuestra su impresionante inteligencia para mantener a millones de personas dentro de un juego y los alejan de tomar parte de responsabilidad dentro de la vida real. 
Imagen común en un noticiero deportivo denigrando a la mujer.

Las televisoras mexicanas cumplen la labor más importante, reprimir al pueblo sin necesidad del uso de fuerza física. Mientras usted ve el partido del fin de semana y esta al pendiente de como va su equipo, los políticos mexicanos se llevan su dinero a España, o se lo regalan a banqueros, o piden prestamos multimillonarios a bancos internacionales a nombre de usted, y la mayor parte de las veces no esta consciente de este hecho aunque lo llegue a presenciar, no le toma interés, debido a que su instinto le dice que usted ya pertenece a un grupo, uno muy exitoso que gana campeonatos o si no, al menos sufre con el, vive pesadillas y felicidad, hablamos de su equipo de fútbol. Ahora que lo sabe tiene la opción de continuar en la manada o poner manos a la obra y tomar las riendas de su país y el futuro de sus hijos.



Por HDJA (Hijo De Justicia Ausente).


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2 comentarios:

  1. Eso yo lo se desde un tiempo para aca. Yo soy un "drogadicto televisivo" rehabilitado y estoy deacuerdo en todos los argumentos que el gobierno utiliza para mantener 'estupidizada" a la gente que no tiene como contratar una compañia de cable y es forzada a mirar los unicos canales "gratuitos" en tv abierta. CADA VEZ SOMOS MAS LOS CONVENCIDOS!!!

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  2. Bueno, coincido con la forma en que "manejan" a la humanidad las televisoras. Sin embargo, yo pratico este deporte (futbol)desde que tengo uso de razón, y me apasiona claro que si. Me gusta ver los partidos de mi equipo favorito. Pero... estoy de acuerdo en que lo han hecho un gran negocio, lo cual está lejos de ser "lo que el aficionado quiere". Como aficionado quisieramos ver a nuestro equipo ganar, pero cuando se venden jugadores sólo por "negocio" a otros equipos y "obligan" a los aficionados a comprar boletos a un alto costo (nomás porque jugarán equipos "grandes"), sí considero una verdadera "lavada de coco", al igual con los "bonos" o cualquier promoción que obliga a la gente a estar ahi... No soy partícipe de esa vorágine futbolística que deja sin lana (y a veces sin neuronas) a los aficionados. Creo que hay que tener un verdadero autocontrol, criterio y poder de análisis para discernir cuando se trata de un lavado de coco o es un simple disfrute de un atractivo partido de futbol.

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